Foto: "Verano en diciembre"
Toda la crítica se ha puesto a los pies de Eduard Fernández en su interpretación del protagonista de Marco. Una historia basada “en hechos reales”, en la que un señor, Enric Marco Batlle, se infló a dar charlas, especialmente en centros de enseñanza, contando su paso como superviviente por campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Está dirigida por Aitor Arregi y Jon Garaño, responsables de Loreak, La trinchera infinita y Handia. ¡Un valor seguro!
Tenemos esta semana un par de estrenos que vienen del teatro. Verano en diciembre es la adaptación cinematográfica de la homónima obra con texto y dirección de Carolina África que se estrenó con gran éxito en otoño de 2020 en el Teatro María Guerrero. África es quien ha adaptado el texto y dirigido la película. Nos cuenta una historia de cuatro generaciones de mujeres que se reúnen en casa familiar para conmemorar el aniversario de la muerte del padre y en la que afloran los conflictos generacionales. Una “dramedia” costumbrista que más de uno califica como más cercana al drama televisivo que a la experiencia cinematográfica. Quizá su punto más fuerte sea su reparto: Carmen Machi, Bárbara Lennie, Vicky Luengo, Beatriz Grimaldos, Lola Cordón, Irene Escolar, Antonio Resines...
La cocina es una maravillosa obra de teatro de Arnold Wesker (a quien, por cierto, El Duende tuvo el privilegio de entrevistar). El mexicano Alonso Ruizpalacios, un tipo con una trayectoria muy interesante (Güeros, 2014. Museo, 2018 ), ha llevado a cabo esta adaptación. Nos habla de las desigualdades de la sociedad capitalista y de lo duro de la vida del inmigrante que se debe adaptar a un nueva realidad a través del microcosmos de una cocina. Los dos protagonistas principales son Rooney Mara y Raúl Briones.
Con esta no se pone de acuerdo la crítica. Para algunos es “una gran decepción”, “barullo” y, para otros, una deslumbrante maravilla visual (en blanco y negro, como hizo en Güeros). Reconozco que lo del barullo me lleva directamente a las últimas películas y series que he visto relacionadas con la cocina (Boiling Point, The Bear). No sé si necesito más. Habrá que ir a verla, sí. Bueno, ya veremos.
De Amanece en Samaná, de Rafa Cortés, he leído que es una comedia simpática. En ella, dos parejas de amigos (interpretados por Luis Tosar, María Luisa Mayol, Luis Zahera y Bárbara Santa-Cruz) se van de vacaciones a República Dominicana a celebrar su amistad de dos décadas. Pero se ve que la cosa se tuerce cuando empiezan a aflorar los secretillos. Algo me dice que va a triunfar.
Tenemos un par de estrenos de cine francés cuyos protagonistas son personas reales que luchan por mejorar nuestra sociedad. En el caso del director y guionista francés Antoine Raimbault, su opera prima Una íntima convicción, un drama judicial que recibió fenomenales críticas, nos ponía sobre aviso de que hay que seguirle la pista, aunque su segunda película, Sexygénaires, no siguiese la misma senda. En Cuestión de principios nos relata la investigación del eurodiputado francés José Bove y su equipo en la trama puesta en marcha por la industria tabaquera para seguir haciendo negocio a costa de la salud de los ciudadanos y que demuestra que todavía se puede tener algo de fe en quienes defienden nuestros derechos.
El angel de los pobres, de Frédéric Tellier nos habla sobre Henri Grouès/Abbé Pierre, quien en los convulsos años de la Segunda Guerra Mundial se puso del lado de los sin hogar. Dicen de ella que es un biopic un poco pomposo y grandilocuente y llega a hacerse un poco largo (bueno, ayuda que sean 147 minutos). Por mi parte, sin haber visto ninguna de las dos he de decir que ojalá más historias de personajes históricos inspiradores que de asesinos a sueldo. Y no es que me quiera referir aquí a Michael Keaton y El método Knox. Pues más allá de su trama neonoir y que se diga que es demasiado convencional puede tener como punto de interés el poner un foco en la demencia.
Esta semana también tenemos el estreno de dos documentales escalofriantes; de terror, podríamos decir. Ambos muy bien recibidos por la crítica especializada. Y profundamente necesarios. Por un lado, No other land que narra el terrible drama que vive el pueblo palestino con sus tierras ocupadas por los colonos palestinos. Dirigido por cuatro cineastas: Basel Adra, Hamdan Ballal, Yuval Abraham y Rachel Szor.
Por otro, Hollywoodgate, opera prima de Ibrahim Nash’at. Narra la ocupación por parte de las las fuerzas talibanes del complejo Hollywood Gate, del que se dice que es una antigua base de la CIA en Kabul.
*Presidente de la Asociación Española de la Prensa Cinematográfica) de quien se cuenta que hacía sus reseñas analizando el cartel de la película. Nosotros damos un paso más: nos leemos sus sinopsis y lo que otros han dicho de ellas.