El director, y también actor, Brady Corbet, debutó en 2015 con muchos fuegos artificiales con la película británica La infancia de un líder (está en Filmin), a la que siguió Vox Lux: El precio de la fama. Siete años después de esta parece que por fin ha encontrado el camino del éxito, pues muchos reclaman para The Brutalist ser uno de los estrenos del año. Y estamos en enero…
Le avalan, de momento, el León de Plata a la Mejor Dirección en la Biennale de Venecia y dos Globos de Oro: uno a Mejor Director y otro a Mejor Película Dramática. El guión lo firma el propio Corbet junto a la noruega Mona Fastvold, su pareja.
Con un reparto encabezado por Adrian Brody, Felicity Jones y Guy Pearce, nos cuenta una epopeya de cuatro décadas en la vida de un arquitecto húngaro formado en la Bauhaus que emigra de Europa en la posguerra.
Esta semana se darán a conocer las nominaciones a los Oscar. También esta semana nos hemos enterado por las redes sociales que para mejorar el acento húngaro de Brody y Jones se empleó una aplicación de IA (y otra, también para diseñar algunos de los decorados). Quizá este anuncio evite que ambos puedan ganar este premio, ya que sus voces en la película no son del todo humanas.
¿La crítica qué opina? Que no nos la perdamos. Dura 215 minutos, lleven un cojincito cómodo.
Seguimos hablando de ricachones. La tailandesa Cómo hacerse millonario antes de que se muera la abuela supone el debut de Pat Boonnitipat como director. Su trama resulta muy contemporánea: un joven streamer, llamado «M», se las tiene que ingeniar para convencer a su abuela de hacerle beneficiario de su millonaria herencia. Para ello decide cuidarla en sus últimos días. El caso es que nos encontramos ante una “conmovedora” y “simpática” historia que va más allá del cinismo inicial del protagonista. «Roza la cursilería” y “la sensiblería”, pero sin cruzar líneas rojas. Su reparto lo encabezan Putthipong Assaratanakul (que interpreta a “M”; si he sido capaz de aprenderme el nombre de Apichatpong Weerasethakul, ¿por qué dudan de que también me acuerde de este?) y Usha Seamkhum (la abuela). ¡Preparen los clínex!
Y más ricos, que también lloran y también la palman. La pandemia covítica ha alimentado alguna que otra mente calenturienta. La de Galder Gaztelu-Urrutia, es una de ellas. Tras sus aclamadas El hoyo y su continuación, El hoyo 2, (ambas, disponibles en Netflix) presenta La fiebre de los ricos, con un argumento que Luigi Mangione, el asesinaCEO’s, celebraría con champán. En ella, un virus mortal empieza a infectar a las personas más ricas del mundo… Y claro, estas tratan de deshacerse de sus fortunas, pero llega un momento en que nadie quiere recibirlas para no diñarla. No me digan que no tiene coña la cosa. Su internacional reparto lo encabezan Mary Elisabeth Winstead (Calle Cloverfield 10), Rafe Spall (La vida de Pi) o Lorraine Bracco (sí, si; la de Los Soprano y Uno de los nuestros). Pues no sé a ustedes, pero a mí me parece interesante el tema. ¿Quién se viene a verla?
Han pasado quince años desde que Luis Carrasco estrenó su primera película. Y es que sacar adelante una producción no es nada fácil, señoras y señores. Esta semana se estrena su segundo film, Miocardio, drama interpretado por Marina Salas, Vito Sanz (cómo me alegro de que le vaya bien a este buen actor), Pilar Bergés y Luis Callejo. Una película sentimental sobre relaciones de pareja, cuentas pendientes y corazones rotos y sanados.
En el apartado de animación, esta semana tenemos a la letona (en realidad es coproducción Letonia-Bélgica-Francia) Flow, un mundo que salvar, de Gints Zilbalodis, recientemente ganadora del Globo de Oro a la mejor película de animación. Premio que también le han otorgado, entre otras, las asociaciones de críticos de Nueva York y Los Ángeles. Tiene la pista despejada para el Oscar, vaya.
Es el segundo largo de animación de Zilbalodis tras la minimalista pero cautivadora Away (2019).
En la distópica fábula que nos ocupa tenemos a un gatito que se despierta en un mundo cubierto de agua y que busca refugio en un barco con un grupo de otros animales. No será una travesía placentera…
Dicen de ella que es “conmovedora”, “innovadora”, “sentimental”, “bella”… ¡Miau!
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*Óscar Peyrou es el presidente de la Asociación Española de la Prensa Cinematográfica. La leyenda cuenta que hacía sus reseñas analizando los carteles de la películas. Nosotros damos un paso más: nos leemos las sinopsis y lo que otros han dicho de ellas y hacemos un refrito picadito sazonado con anécdotas personales y chistes malos.
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