Ha pasado algo más de un año desde que Sustrai, primer espectáculo de la compañía donostiarra ZirKuSS, se estrenase oficialmente. Desde entonces ha estado presente en ferias y festivales, con muy buena acogida, pero es ahora cuando comienza su gira por toda España que comienza el domingo 12 de octubre, en Jaén, en el Festival de Teatro de Cazorla, y desde allí llegará al Teatro Circo Price (16-18 oct.) Posteriormente, pasará por Guetxo, Rentería, Castellón, Murcia, Pamplona, La Rioja, Logroño…
Sustrai (que significa raíz en euskera) es, en las propias palabras del fundador de la compañía, el también acróbata y bailarín Lander Briones, «un universo paralelo en el que una estudiante del doctorado de Bellas Artes [Miren Barrena], intenta unir las artes escénicas con las artes plásticas. Y en este proceso se encuentra con una sociedad abstraída que va encontrando el orden y el desorden en su interior y va captando momentos a través de la escayola, momentos vacíos que los convierte en acrobacia».
Barrena, que además de artista plástica es acróbata, está realizando realmente un doctorado sobre esta profesión y Briones le ofreció un espacio donde, además de documentarse participase en la propia producción y creación del mismo.
Ella, prosigue Briones, «explora con los cuerpos, capta momentos acrobáticos en escayola y hacemos un símil de la escayola con la vida real, a través de la entropía, de la degradación de la materia, que modifica la materia. Y entonces jugamos con ese mensaje de la escayola que fragua, que pasa de líquido a sólido y no tiene vuelta atrás».
Un proceso de creación colectiva
El título de Sustrai nació del propio proceso de creación del espectáculo: «imaginé una creación invertida, como quien dice. En vez de trabajar desde un “yo tengo esta idea y quiero llevar esta idea al escenario y todos ejecutáis un papel”, la idea era preguntar a las artistas ¿qué queréis decir y poner sobre el escenario?». Esa puerta abierta a la participación ha estado abierta en otros ámbitos, como fueron la creación de la música o el vestuario. «La idea es que cada uno creases algo con lo que se identificasen, que pusieran su raíz».
Los números circenses no funcionan de manera aislada. Los diez intérpretes desempeñan varios roles porque «no es una función en la que ejecuten un acto propio y se acabó, sino más bien, desde que empieza hasta que termina, es una única historia. Hay un hilo dramatúrgico y ejecutan diferentes papeles acrobáticos. Son siete actos en los que vamos a ver trapecio, un dúo de trapecio, cuerda, tela, malabares, hula-hop… Son parte de un todo en el que está muy coreografiado».
Los intérpretes, además de la mencionada Miren Barrena, son Alexandre Sierra, Asvin Lopez, Dominika Krzymowska, Iñigo Arroyo, Matthias Elgueta, Olivia Bernardo, Paloma, Farga y Toni Gutierrez.
Las dos coreografías de danza contemporáneo del espectáculo las creó Gil Harush y las dos acrobáticas, las firma el propio Briones. Maialen Alberro, «formó parte de todas como repetidora y Dance Captain, que es la figura responsable que va puliendo todas las coreografías y dándole una coherencia», comenta Briones.
Apuesta por el talento joven
Briones tuvo la brillante idea de proponer al conservatorio de San Sebastian, Musikene, que lanzase a sus alumnos del grado de composición la propuesta de crear las siete partituras para cada una de las piezas. «Los músicos tenían que ir adaptando su idea musical al tiempo que nosotros creábamos cada parte, de forma simultánea.
«Al final era una apuesta también por la juventud, por los nuevos creadores, por las nuevas líneas, porque también nos han enseñado un montón y me han enseñado a descubrir qué ritmos vienen… Ellos me han ofrecido infinidad de variables que yo ni contaba con ellas». Los compositores de las piezas son David Enrique, Leonel Aldino, Nahia Vicente, Nuria López, Miguel Mercero y Paula Iglesias y Borja Antón.
Doble riesgo: físico y conceptual
«El circo siempre es riesgo es inherente al nosotros va con nosotros y por eso se entrena mucho para intentar rebajar al máximo posible ese riesgo, pero este existe y siempre está ahí. En lo artístico creo que no hay nada escrito, siempre hay riesgo. Lo que sí que tenía claro es que dentro de lo contemporáneo entra todo y el circo contemporáneo en España no tiene un lugar muy reconocido socialmente. Así como el público reconoce fácil y cada vez tiene mejor o más ojo, respecto a la danza contemporánea, al ballet clásico o al teatro, el circo contemporáneo apenas lo tiene. Entonces creo que el riesgo artístico que asumí fue relativo.
Su pretensión y objetivo final no es más que el de hacer disfrutar al público: «Quería un circo en el que la gente entrase en nuestro universo, se dejase llevar por la emoción de la música, la emoción de las coreografías, del alma que le ponen los artistas. Queremos regalar 70 minutos de alegría, de disfrute, de sorpresa, de riesgo, de alucinar, porque alucinas de hipnotización, porque Paloma te hipnotiza con sus hula-hops, es afable el número de malabares, es riesgo total el número de trapecio… Jugamos con esas emociones», señala.
¿Para todos los públicos?
Y esto nos lleva a comentar a qué público va dirigido este espectáculo: «Es verdad que lo concebí inicialmente para un público adulto. Luego he visto cómo reacciona el público infantil. A veces menospreciamos, en cierta manera, al público infantil, entendiendo que tenemos que dedicarles o hacer un tipo de cosas para que ellos disfruten y no es verdad. Unos clichés. Y en el circo eh abusamos de ellos. La experiencia me ha demostrado que se quedan igual que el público adulto: abstraídos y metidos totalmente en el show y que funciona perfectamente. Por lo tanto, está concebido como público adulto, pero es lo puede ser un público familiar el que lo vea.
Más allá de ZirKuSS
Lander Briones, además de tu tarea al frente de la compañía es acróbata aéreo. «Creé la compañía ZirKuSS, pero también trabajo en un circo, en el único circo vasco itinerante que existe con carpa, que se llama Gure Zirkua (“Nuestro circo”, en euskera), y pertenezco al elenco desde hace cinco años. Estamos de gira ahora».
Boceto del próximo proyecto
«Estamos creando ya la siguiente pieza, edrrrrque hemos empezado ya a crear. Se llama K.os. Vamos a hablar de algo mucho más crudo, porque hablamos sobre la guerra, sobre la barbarie y sobre la pérdida por la guerra. Y todo simbolizado a través del cuadro universal del Guernica de Picasso. La idea sería poder estrenar en marzo del 26 para poder empezar a hacer festivales ferias y algo de programación con el objetivo firme de en el 27, que se celebra en el 90 aniversario del bombardeo, realizar la la gira nacional». Incluso se plantea proponerle al Museo Reina Sofía una colaboración, y poder representar una pieza frente al cuadro, lo que nos parece una excelente idea.
Sustrai. ZirKuss. Del 16 al 18 de octubre en el Teatro Circo Price. [Entradas]