Foto de cabecera. Alejandro Pantin con sus obras ©Alex Nowiczewski
Con frecuencia, los nuevos lenguajes de expresión pueden nacer de la descomposición de otros que ya han cumplido su función en terrenos vecinos. Las líneas que marcan fronteras se atenúan, revelan técnicas que dan paso a nuevas perspectivas y piden ‘leer entre líneas’.
Así se llama la primera exposición individual del artista Alejandro Pantin Gil: ‘Leer entre líneas’, una muestra de obras escultóricas de libros tallados, convertidos en figuras únicas e irreproducibles de la anatomía femenina. Libros defectuosos o revistas descartadas cobran una nueva vida a través de un modelado tridimensional, una técnica que desarrolla gracias a sus conocimientos como arquitecto de profesión y que comienza por la curiosidad del artista en contar nuevas historias entre las líneas de los libros.
De la arquitectura traslada la precisión del corte topográfico para dotar a la escultura de proporción y exactitud, mientras que la literatura le sirve como el elemento sorpresa, artístico y creativo de sus obras. Libros que se convierten en lienzos, pero también en artistas, un doble papel que solo se comprende al visitar la exposición y mirar de cerca cada detalle que guardan más allá de la portada.
Alejandro Pantin comenzó sus primeras investigaciones escultóricas con esta técnica hace cinco años, partiendo de una imagen 2D que luego le permite generar obras tridimensionales que esconden sorpresa en sus colores, contenidos y expresiones finales. El artista se centra en la forma, pero descubre que los mismos soportes le declaran intenciones imprevistas, que lejos de alterar la naturaleza de su arte proponen una nueva mirada hacia los valores clásicos de proporción, precisión y orden.
La renovación de recursos pone en valor una obra que transforma lo descartado en un objeto de deseo, reflexionando acerca de la sociedad de consumo y de la relación entre información y tecnología y poniendo en manifiesto “la importancia de preservar y apreciar los medios tradicionales de comunicación en un mundo cada vez más digitalizado”, como lo afirma Pantin.
Esta exposición individual, comisariada por la curadora de arte Inés Alonso Jarabo, se suma a la trayectoria del artista después de su participación en la 58º edición del Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura (2023), así como en el Brighton Festival y en otras galerías como The Perpetual Lab (Barcelona) y Mínima Gallery (Mykonos).
Ubicación: Remax Arte (Colmenares, 7)