Aunque algo hemos contado en la entradilla, por favor, explica a los lectores de El Duende qué es Autsaider Cómics. Es una pequeña editorial, principalmente de cómic, centrada en publicar con mucho mimo historias que se salgan del carril. Hay gente que dice que es material muy arriesgado, no lo sé, desde luego lo que no es, es convencional o aburrido.
Ahora que Autsaider se acerca peligrosamente a su décimo cumpleaños, parece que la cosa va de rechupete. ¿Cómo le sienta eso a tu carrera de dibujante? ¿Te queda tiempo para Ata? Procuro que la editorial no me devore del todo y que quede un hueco para el Ata dibujante, el Ata padre, amigo, hortelano, albañil y armador, jajaja, de cualquier manera sí que tengo la sensación de que ha menguado mi necesidad de hacer cómics, supongo que eran en cierta medida una válvula de escape a mi vida de mierda, y ahora que la tengo mejor organizada, necesito explotar menos.
Como ilustrador te has definido “entre lo chungo y lo finolis”. Pasa algo parecido en Autsaider. Editáis cosas muy chungas, freakies, marginales y sudorosas. Pero lo pasáis bomba afinando el envoltorio, la producción gráfica de vuestros libros… Cuidamos mucho el objeto por puro disfrute, por tratar de aportar algo y a lo mejor también porque no veo que sean cosas tan chungas y marginales, me pasa más bien al revés. Me parecen obras estimulantes, provocadoras, que te obligan a mirar de otro modo, que te ayudan a pensar más ancho. Es que con el trabajo que lleva todo, dedicarse a hacer cosas simplonas, amenas sin más, pues como que no.
Si queremos hacer caso al tema que ocupa este número, lo tenemos fácil contigo, acabáis de lanzar El Club de las Chicas Malas de Ryan Heshka. Desde vuestra misma web lo vendéis como un montón de cosas metidas en una batidora. Fusión de géneros o más bien fusión de… Pues creo que tiene la fusión Autsaider, jajaja, entretenimiento, contenido con recado y deleite estético. Tiene base de novela pulp pero con chicha. Plantea un paralelismo con el avance del ultraconservadurismo actual y la revuelta de las Chicas Malas como adalides de un feminismo combativo, con un trabajo gráfico exquisito que remite al cine negro de los años 40.
¿Qué autores de historieta o de cualquier otro medio te han podido influir para que como editor y como dibujante te guste tanto el salseo, la ligazón imposible, la reducción de vinagre de cartón al cannabis, el atún en manteca colorá? Jajajaja, igual la sensación de coherencia y homogeneidad en lo que hago solo la veo yo, pero por ejemplo, Roger Peláez, Benjamin Marra, Santiago Lorenzo, Mike Judge, Gary Panter… gente que te entretiene mientras te dispara balas dum-dum.
Necesito que hablemos de Magius y El Método Gemini. Un retrato más de la mafia italoamericana, pero con un importante acento murciano… ¡otra mezcla rara! Bueno, Magius es murciano y aprovechó expresiones y construcciones de su tierra para imitar el intraducible argot y los acentos de los barrios bajos neoyorquinos, la verdad es que aunque es algo anecdótico, funciona muy bien. El Método Gemini es un relato de mafia a la altura de los clásicos del género.
¿Y cuando será el próximo libro de Ata? Preparas una gran obra, por fin, ¿o qué? Pues ando con un cuento infantil ilustrado con cierta mala leche, Tu coche molesta, un libro sobre personajes históricos con Edu Bravo y la intención de armar un recopilatorio de mi propio material disperso de los últimos años… todo avanza, lentamente, eso sí.