La serie Pure humans de la fotógrafa Eva Kern (Viena, 1953) es una galaxia de retratos variados, de diferentes razas, edades y expresiones. Son torsos desnudos en blanco y negro, sobre fondo oscuro y con luz frontal. Nada más. ¿Nada más? Sí, es un proyecto lírico: Con esa austeridad se pretende mostrar al ser humano tal como es, objetivamente, sin contaminación alguna de elementos artificiales que distorsionen su apariencia natural. La austríaca Eva Kern se especializó en los noventa en el retrato, después de una década publicando para muchas revistas de su país.
En Pure humans todos los retratos son primeros planos. ¿Por qué escogiste este encuadre? Quería unas fotografías íntimas, quiero estar cerca de las personas que posan, me importan detalles suyos como la textura de la piel.
Las fotos son en blanco y negro. ¿Por qué? Siempre uso blanco y negro, nunca color, simplemente porque no me interesa el color. Si bien a veces pinto mis fotos a mano una vez impresas.
Y los modelos están desnudos. Como dice el título, son humanos puros, lo que significa que nada (ropa, maquillaje, etc) debería distraer al espectador del aura tan singular que tiene cada persona.
¿Cuál es la intención de este proyecto? Quiero estar en contacto con la gente, tocarla.
¿Tienes algún truco (confesable) para crear la mejor atmósfera para hacerle una foto a alguien? La persona tiene que sentirse segura. Me gusta trabajar en silencio, sin música ni nadie presente salvo el modelo y yo. Concentro toda mi atención en aquel a quien tengo frente al objetivo. Y como sólo trabajo con iluminación natural, el lugar tiene que tener una buena luz.
¿Te resulta más fácil hacer la foto si el modelo es conocido? Como mi trabajo es muy intuitivo, me resulta más fácil fotografiar a personas con las que no tengo una relación estrecha, porque cuanto menos sepa de alguien, mejor puedo dejar que las cosas fluyan espontáneamente. Me explico: Si conoces muy bien a alguien, quieres añadir los sentimientos que ese alguien te provoca a su retrato. Si no, esa persona luce con objetividad. No es el cerebro, es el instinto lo que actúa… ¡o una suma de ambas cosas!
Usas una cámara analógica. ¿No te convence la digital? Claro que me convence. La uso para retrato comercial, por ejemplo para páginas personales. Pero analógico y digital son dos pares de zapatos distintos. Estoy segura de que la fotografía analógica nunca caerá en el desuso por completo, porque trabajar con una película es muy especial. Con ella no puedes controlar tanto la foto que haces durante el proceso, tienes que esperar al revelado. Pero la magia del cuarto oscuro… La echo mucho de menos, es parte de mi trabajo. Seguramente las fotografías producto de la cámara analógica sean más imperfectas, pero no hay nada más aburrido en la vida que la perfección. Hoy todo está abatido por el Photoshop, y no es eso lo que quiero ver. Me deja fría.
Un fotógrafo español, Chema Madoz, dice que la fotografía y la poesía comparten un interés común, crear imágenes intensas. ¿Estás de acuerdo? Absolutamente. Con mi trabajo lo demuestro. Creo que es lo que lo hace artístico.
Texto: Alejo Pelayo
Fotos de la serie Pure Humans. Arriba: Kusum
La exposición Pure Humans forma parte del European Month Of Photography 2010 – Eyes on. Se inaugura el 4 de noviembre de 2010 en el Museo de Historia Natural de Viena. www.monatderfotografie.at