En octubre cumple 23 años pero ya es toda una actriz veterana. Esta temporada participa en varios estrenos de primera línea. Algo tendrá que ver las grandes críticas cosechadas por sus recientes interpretaciones.
Desde diciembre estarás en Agosto (Condado de Osage), de Tracy Letts, dirigida por Gerardo Vera, junto a dos grandes como son Amparo Baró y Carmen Machi. ¿Cómo accediste a tu papel? Él vino a ver El mal de la juventud a la Abadía y me ofreció el personaje de Jean. Fue una de las cosas más fáciles que he vivido: sin tener que pasar por ninguna prueba. Además yo había visto la función en Nueva York y salí de allí pensando “ojalá que pueda hacer en algún momento este personaje”.
¿Cómo es Jean? Es una adolescente que está viviendo un proceso difícil porque sus padres se están separando. Digamos que dentro de todos los problemas de la familia es la única que podría salvarse. Es una chica con mucha chispa, muy divertida. Es como el contrapunto. Está aprendiendo de todo lo que pasa en esa familia y lo sufrirá, seguro.
Empezaste con nueve años, ¿tienes la sensación de tener una carrera encarrilada? Yo creo que eso en esta profesión esa sensación no llega nunca. Yo no la he vivido y por lo que me voy conociendo no creo que la viva, porque siempre tengo la ansiedad de qué pasará el año que viene… Además, estoy estudiando una carrera (Filología Inglesa) por ese miedo de, ¡vamos a ver, qué va a ser de ti! Ahora mismo yo creo que lo estamos viviendo todos.
¿Pero en escena te sientes más segura? Supongo que después del personaje que he interpretado en el Español (Oleanna, de David Mamet, junto a José Coronado) sí noto que he dado un paso hacia delante. Siento que ahora puedo estar una hora y media en escena y que puedo hacerlo durante dos meses. Que puedo llevarlo y no pasa nada. El hecho de hacer ahora este otro personaje más pequeño, secundario, lo veo más fácil, estoy un poco más relajada.
¿Te ha dirigido alguna mujer? Tengo una muy buena amiga, Carlota Ferrer que sí. Fue ayudante de de dirección de Àlex Rigola, trabaja en la Abadía, y ahora me va a dirigir en una cosita que vamos a hacer en la Sala Triángulo, que se llama Los Cuerpos Perdidos, es una historia sobre la matanza de mujeres en Ciudad Juarez. Para mí es una grandísima directora, creo que va a llegar muy lejos. El texto es de un dramaturgo jovencito que se llama José Manuel Mora, que escribe maravillosamente bien.
Eres de familia del mundo del teatro, pasaste por la escuela de Cristina Rota, educas tu voz, te fuiste a Londres a estudiar… Pero, ¿qué aprende uno de uno mismo? Es lo más importante. Me gusta aprender de la gente con la que trabajo. Yo he tenido mucha suerte. Àlex Rigola fue la primer persona que, con 17 años, me dio las primeras claves. Ahora que han pasado muchos montajes, las cosas que él me dijo las tengo incorporadas sin darme cuenta. Y así me va pasando con los distintos directores y actores con los que me voy topando. Las voy probando.
Álex Barahona le pregunta a Irene Escolar: ¿Qué es lo último que piensas antes de salir a escena? Siempre me acuerdo de Lawrence Olivier (popularizó la expresión “miedo escénico”) que antes de hacer Hamlet pensó que no iba a ser capaz de hacerlo.Te dices no puedo, yo no me dedico a esto más… Él de pronto se paró y dijo, “pero si llevo esperando esto todo mi vida. ¡Que suban la puta cortina!”
Texto: EDM
Total Look: GALS & GUYS
Fotografía: Sergio de Luz. Estilismo: Blanca Puebla. Maquillaje y peluquería: Wioleta Gosiewska.
Irene Escolar actúa en: Agosto (Condado de Osage), del 7 de diciembre al 19 de febrero de 2012 (Teatro Valle Inclán. Madrid) / Los cuerpos perdidos (28 y 29 de octubre, Sala Triángulo. Madrid) / De ratones y hombres (del 8 al 11 de marzo de 2012 en el Teatro Arriaga. Bilbao).