“La enfermedad y la vejez disfrazan a cualquiera de bondadoso”, así de tajante se muestra la escritora Clara Sánchez (Guadalajara, 1955) en sus respuestas a nuestra entrevista. Y no podemos estar más de acuerdo, ¿qué mejor disfraz para un verdugo nazi que el de anciano? A tan truculento paraje nos acerca Lo que esconde tu nombre, la novela ganadora del Premio Nadal 2010.
La primera pregunta, no puede ser otra que ésta: ¿qué esconde Lo que esconde tu nombre? Habla de que no todos somos lo que aparentamos ser, de que una cara agradable puede ocultar a un monstruo y de que mucha gente que abusa de los demás logra escaparse sin pagar. Pero también habla de la profunda amistad que puede surgir entre personas de edades muy distintas y del amor como recurso salvador para darle sentido a nuestra vida. Incluso los monstruos se enamoran en esta novela.
¿Cree que existe mejor disfraz para un responsable de la masacre nazi que el de una pareja de ancianos pasando sus últimos años en la costa española? Es el disfraz ideal. Sólo se necesita un pantalón corto, una gorra y la debilidad propia de los años. La enfermedad y la vejez disfrazan a cualquiera de bondadoso. Ves a un anciano y piensas: este hombre trabajó, se esforzó y se jubiló y ahora está en paz, pero no siempre es así.
¿Por qué cree que, tras la llegada de la democracia a España, no se les ha perseguido y sometido a la justicia? Esta es la gran pregunta. Nadie los denunció, no se les consideraba peligrosos… No conozco el entramado judicial, el caso es que muchos han muerto en sus camas bajo el calor de nuestro sol.
¿Quién es Clara Sánchez? ¿Lleva algún disfraz? ¿Alguna vez le hubiera gustado esconderse tras alguno o convertirse en el trasunto de algún personaje literario? Odio aparentar lo que no soy, por ejemplo, más inteligente, mayor alcurnia familiar, más riqueza, más y más de lo que sea. El dar gato por liebre me hace sentir mal, como si yo no fuera suficiente, así que a veces tiendo a rebajar mi perfil sin darme cuenta. Pero también es cierto que hay algo de Dr. Jekyll y Mr. Hyde en mí, cuando me tocan mucho las narices sale Dr. Jekyll. Y todos somos personajes literarios en potencia, sólo hace falta que un escritor se fije en nosotros. Me habría gustado que se fijase en mí Flaubert, lo que es imposible, o Javier Marías, lo que aún sería posible.
¿Se puede vivir de ser escritora full-time o también dedica su tiempo a otros menesteres? Nunca he escrito para comer. He trabajado en otras cosas precisamente para poder escribir y nunca me pregunté si me daría para vivir. Las cosas han ido rodando y ahora sólo me dedico a escribir y a todo lo que lleva anejo. A veces estoy mejor de dinero y otras, peor.
¿Qué ha significado recibir el Premio Nadal? ¿Qué ha cambiado tras el galardón? Es un premio de enorme prestigio, encontrarme en su lista de premiados me honra como escritora. Y ahora me queda hacer lo que siempre he hecho: escribir, trabajar. Es la mejor manera que conozco de merecerme lo que me dan.
¿Tiene ya en mente su próxima novela? De momento, en cuanto pueda ponerme a ello, pienso continuar la historia de Lo que esconde tu nombre.
Texto: Inma Flor
Ilustración: Nuria Cuesta