El motor del viejo continente ocupa el quinto puesto dentro del Plan de Desarrollo Sostenible acordado en 2020 por 166 países. Destaca por el uso de energías renovables, certificados ecológicos y zonas naturales protegidas.
A través de ciudades y pueblos con ADN orgánico, actividades éticas y transportes limpios, el visitante se lleva los mayores recuerdos de Alemania con el mínimo impacto en el entorno.
Si quieres encontrar un destino para desconectar de tus rutinas y conectar contigo mismo y los tuyos apúntate nuestras sugerencias. Puedes encontrar muchas más y una completísima información (en castellano) en su web germany.travel.
La biblia verde de Berlín. GreenMe Berlín descubre los puntos más sostenibles y sorprendentes de la capital. Esta guía eco online recoge más de 100 restaurantes veganos, cafeterías ecológicas y espacios del estilo, ordenados por distritos. Cuenta con un calendario de eventos y un podcast de entrevistas inspiradoras.
En los GreenMe Kiez Tours sus fundadores enseñan a los turistas marcas de cosmética natural, boutiques éticas, cocinas zero waste, clubs de ciclistas y perfiles curiosos con su misma filosofía. Hamburg CARD Green impulsa desde Hamburgo una idea parecida, con descuentos en turismo sostenible.
Disfrutar cada instante. En 1999 nació en Italia Cittaslow, un movimiento que bebe del Slow Food y que reivindica la vida tranquila. En el mundo solo 275 ciudades de 30 países lucen su distintivo sello del caracol. Las ‘ciudades lentas’ tienen menos de 50.000 habitantes, apoyan políticas ambientales y cumplen la mitad -o más- de 70 recomendaciones, como multiplicar las zonas peatonales, remodelar antes de construir o no tener restaurantes de comida rápida en el centro.