¿Por cuánto venderíamos a un amigo? ¿Por cuánto compraríamos a un enemigo? No contestemos, ya se encarga el teatro de exhibir nuestras desvergüenzas. Al menos, el de Bertolt Brecht. El Centro Dramático Gallego, con su viejo amigo Luis Tosar a la cabeza, presenta el musical La ópera de los tres reales, en el que el dramaturgo alemán, asociado con el músico Kurt Weill, versionó una pieza de John Gay para criticar la corrupta sociedad prehitleriana. Tosar nos cuenta los detalles.
¿Estás en condiciones de enfrentarte a un musical después de lo que te castigaste la voz al hacer de Malamadre? Sí, no me quedaron efectos secundarios (risas). Nunca había participado en un musical serio, aunque sí en actuaciones tipo cabaret. Esto es más difícil, la música que compuso Kurt Weill es muy canalla. Se arriesgó a romper los patrones clasicistas de su época para popularizarlos y escribir estas canciones humorísticas. Algunas, como Moritat de Mackie Messier, han acabado teniendo vida propia.
Esta es una de las piezas más representadas del siglo XX. ¿Qué novedades aporta este montaje de tu amigo Quico Cadaval (su director)? Ninguna… (Risas). Bueno, sí: hemos recuperado el gamberrismo originario del texto. Creo que, con el tiempo, a los clásicos se les imprime un tono más popular al que tienen inicialmente. Sobre este clásico Quico hizo una investigación, y descubrimos que Brecht y Weill eran muy gamberros, casi tanto como nosotros. Y que el ambiente de corrupción de la obra aún lo respiramos hoy. Brecht dice por boca de mi personaje, Mackie Navaja, que robar un banco no es nada comparado con fundarlo. La diferencia es que ahora tenemos agencias de calificación.
Mackie Navaja es una joya: regenta un burdel, legitima su bigamia gracias a sus amistades con la Iglesia y pacta favores recíprocos con la policía. Otro pieza para tu currículo. ¿Prefieres hacer de malo que de bueno? Lo más importante es que el personaje, independientemente de que sea bueno o malo, tenga esquinas. Pero, normalmente, los malos son más interesantes, más complejos y más relevantes en la trama. Los buenos suelen ser meros conductores de la historia.
Tosar empezó a actuar ya en el instituto, donde trabó amistad con el hoy cineasta Jorge Coira, con quien ha colaborado en 18 comidas. Pronto ingresó en el Centro Dramático Gallego y protagonizó la serie Mareas vivas, omnipresente en la Televisión de Galicia durante años. No tardaron en ficharlo directores de prestigio como Aranda y Bollaín. Los lunes al sol le granjeó el primero de sus tres (¡tres!) premios Goya, y lo catapultó a este presente en el que participa en un par de películas anuales sin decir adiós a las tablas (ha interpretado Hamlet o El Zoo de cristal).
¿Necesitas que Cadaval te diga lo que tienes que hacer? Un actor sin director no es nada. Uno pierde la objetividad respecto a sí mismo, y necesita que alguien lo asesore. Además, Quico me conoce bien, fue la primera persona que me dio un papel en el teatro. Sabe sacar lo mejor que tengo y me ayuda a no repetirme.
¿El cine español vive del público o de las subvenciones? Creo que en el cine español fallan los canales de distribución. Es un segmento monopolizado, y eso provoca una cuota de pantalla muy pequeña. Las películas se producen, otra cosa es que se vean.
¿Para cuándo un salto a Hollywood a lo Bardem? No lo descarto si me proponen un papel interesante, como el de Corrupción en Miami. Aunque creo que me daría pereza irme.
Popular actor, su carrera musical ha pasado desapercibida. Siendo adolescente, en Lugo, Tosar lideraba la banda de rock Los Huana, en la que un día aterrizó Piti Sanz, hoy un premiado compositor. Los Huana resultó mortal de necesidad cuando Tosar y Sanz se mudaron a Compostela, pero ambos han seguido embarcándose juntos en formaciones musicales: primero, en Magical Brothers, dedicada a un híbrido de teatro y cabaret. Y en 2008, en The Ellas, para interpretar canciones de grupos con vocalistas femeninas. Han terminado convirtiéndose en Di Elas e incorporando temas de cuño propio. Di Elas (Warner, 2011) es su álbum debut.
¿Qué sería de ti sin Piti Sanz? Poca cosa. Nuestras vidas tienen sentido por separado, la mía por mi carrera como actor, la suya por su carrera como compositor. Pero nos retroalimentamos.
¿Por qué cantáis canciones de vocalistas femeninas? Por casualidad. Empezamos tocando rock de los 70, 80 y soul. De pronto, nos dimos cuenta de que, en nuestra lista, muchas eran canciones que cantaban mujeres como Suzanne Vega y Roxette, y decidimos adoptarlo como criterio.
También cantáis un tema tuyo en gallego. En el panorama español, echo de menos más pop rock en castellano, en gallego y en catalán.
¿Qué tal va la venta de vuestro primer trabajo? Ni idea. Nadie pretendía ganarse la vida con esto.
Texto Paloma F. Fidalgo. Foto: La ópera de los tres reales
La ópera de los tres reales · Teatro Fernán Gómez · Del 21 al 31 de julio.