Nuestro cerebro es capaz de procesar veintisiete emociones diferentes en función de los estímulos que recibe. Cuando algo nos toca la fibra sensible, nos conmueve y somos capaces de sentir algunas de esas reacciones psicofisiológicas, universales a todas las culturas, que solo algunas cosas, personas o situaciones son capaces de provocarnos.
Te invitamos a regalar, sea lo que sea, una sonrisa, una mirada, un objeto, una experiencia… Y ojalá seas capaz de tocar esa fibra sensible de los demás con lo mejor de ti. ¡Feliz 2022!